Sé que tengo un buen tiempo desaparecido por esta vía, pero la verdad es que fueron tiempos difíciles para mí y estuve tomándome un tiempo. Hoy les quiero reflexionar sobre la Literatura en tiempos de cuarentena.
Posiblemente, los que me leen desde siempre, sabrán que al momento de escribir esta entrada me encuentro viviendo en Santiago de Chile; lugar donde por segunda vez hemos entrado en una cuarentena obligatoria para toda la Región Metropolitana. La verdad es que si debo ser honesto; esta no es una situación que me afecte particularmente, pues trabajo desde mi hogar desde hace unos cuantos años.
Aun así, me he enfrentado a un pensamiento que seguramente les ha surgido a todos los que han pasado por este proceso de cierres nacionales. Claramente les habrá sucedido por motivos diferentes; pero en mi caso particular, este planteamiento surgió cuando leí que, según el historiador James Shapiro en 1606; el circuito de teatro fue clausurado en Londres. Lo que le permitió a Shakespeare completar durante la cuarentena de manera asombrosa, quizá tres de sus obras maestras; las mismas que, quinientos años después se siguen leyendo; y siguen montándose en escena en teatros de todo el mundo: El rey Lear, Macbeth y Antonio y Cleopatra.
Cuando lees algo como eso, sin importar cuanto estés trabajando, no creo que puedas evitar preguntarte: “¿Qué estoy haciendo con mi vida?” Lo cual por lo general te lleva a un bajón emocional, que junto a otros asuntos personales debo admitir que me afectó bastante.
Aun así, luego de un par de días reflexionando al respecto, llegué a la conclusión de que los tiempos son distintos. Ya no procesamos los estímulos de las mismas forma. Que cada quien tiene diferentes maneras de lidiar con las cosas; y que es absurdo, no solo compararnos con otros, sino que nos obliguemos a crear de la misma forma en que algún día lo hicieron.
A pesar de todo ello, yo vengo escribiendo bastante desde antes de la cuarentena. Lo he realizado a un ritmo al que no estoy acostumbrado. Todas mis ideas, han fluido de una forma que ha sido una total sorpresa, incluso para mí; y llegue a superar la mitad del libro en menos de un mes de trabajo. Una obra que como ya he comentado en mis redes sociales, será una novela romántica dirigía a un público New Adult.
No sé dónde vayamos a parar con todo esto, cuando podremos salir, o cuáles serán los resultados. Pero por lo pronto, puedo decir que optar por la literatura en tiempos de cuarentena me ha funcionado bastante para mejorar, y sanar muchos procesos.
Espero todos se encuentren bien, se encuentren sanos, y podamos volver a leernos en otra oportunidad.